¿A qué desafíos se enfrentan los bosques urbanos?

1. Condiciones de crecimiento difíciles. Los entornos urbanos crean condiciones desafiantes para el crecimiento de los árboles. La exposición a contaminantes, altas temperaturas, sequías e inundaciones extremas y el espacio limitado sobre y bajo tierra inhiben la formación adecuada de raíces y coronas y aumentan la susceptibilidad a insectos y enfermedades.
2. Recursos insuficientes para una atención adecuada. El mantenimiento adecuado es fundamental para un bosque urbano próspero, pero exige tiempo, recursos y coordinación por parte de los gobiernos municipales. También puede resultar difícil establecer prioridades para los propietarios privados con limitaciones financieras. Los recursos limitados también obstaculizan los esfuerzos para inventariar los espacios verdes públicos y privados. En algunos casos, la responsabilidad del mantenimiento de árboles y bosques puede no estar clara debido a detalles limitados sobre la propiedad o tenencia de la tierra.
3. Invasión del desarrollo. La presión del desarrollo, ya sea como expansión o como relleno, a menudo resulta en la pérdida de la cubierta forestal urbana y otros espacios verdes. (Konijnendijk y otros, 2017)
4. Comprensión pública incompleta de los beneficios que proporciona el bosque urbano. Los árboles urbanos a menudo se consideran una carga o un riesgo financiero, pero los beneficios que brindan pueden ser poco comprendidos y subvalorados por el público y los tomadores de decisiones. (Escobedo, Kroeger y Wagner, 2011)

Toda infraestructura verde requiere una instalación cuidadosa y planes de mantenimiento a largo plazo para evitar daños a las carreteras, las aceras y la propiedad. (Hewitt, Ashworth y MacKenzie, 2020) Junto con la atención regular, el derecho políticas, regulaciones y acuerdos institucionales puede ayudar a mantener bosques urbanos sanos y ofrecer importantes beneficios a las personas.